Es importante conservar el refrigerador limpio para evitar olores no deseados.
Desenchufe el refrigerador antes de empezar a limpiar.
Los alimentos derramados se deben limpiar inmediatamente, ya que pueden acidificar y manchar las superficies de plástico si se dejan secar.
Nunca limpie su refrigerador con fluidos inflamables pues podrían dañar la pintura y las partes de plástico.
Para la parte interior lava todos los compartimientos con una solución de bicarbonato o detergente suave y agua caliente. Enjuágalos y sécalos.
Para la parte exterior utiliza una solución tibia de detergente o jabón suave. Límpiala con un trapo mojado y sécala.
Limpie el panel digital y el panel del visor con un paño limpio y suave. Pulverice el agua sobre el paño de limpieza.
Las puertas, las manijas y las superficies del gabinete se deben limpiar con un detergente neutro y luego secar con un paño suave.
No utilice benceno, solvente ni Clorox™ (blanqueador) para limpiarlo. Pueden dañar la superficie del electrodoméstico y crear riesgo de incendio.
Después de la limpieza Comprueba que el cable de alimentación no está dañado y que el enchufe no se ha sobre calentado y está bien introducido en la toma de corriente.
Comentarios
0 comentarios
Inicie sesión para dejar un comentario.